sábado, 25 de febrero de 2017

Entrevista a Marta de Serendipia

Vamos a conocer un poco mejor a una emprendedora maña con mucho estilo. Vamos a Serendipa, una preciosa tienda repleta de buena moda en Zaragoza, para charlar con Marta, su propietaria y amiga de Recorriendo Zaragoza y nos cuenta todo sobre su proyecto y ¡Nos responde a nuestro cuestionario Top Secret!

Marta, hace un año y pico que comenzaste con Serendipia.
Sí, empecé con el local, ahora va hacer un año, con la idea bastantes años más (Risas)



¿Cómo surge la idea de Serendipia?
Yo llevaba mucho tiempo trabajando para una firma española y esto es un proyecto que siempre había tenido en mente. Siempre he sido consumidora del pequeño comercio y el año pasado, fue como “necesito un cambio radical en mi vida” y decidí lanzarme.

¿Te dio miedo?
Mucho, mucho miedo. Porque no sabes si el tipo de tienda que tú llevas en mente va a gustar a la gente, si vas a tener clientes. El primer día, recuerdo que cuando llegué a la tienda, después de la inauguración, y me vi sola (Risas) Fue un poco como “bueno, ahora es cuando empieza esto de verdad”. Da miedo, pero la satisfacción que se tiene supera el miedo.



¿La repuesta qué tal ha sido?
No me quejar, la verdad. Para llevar un año, veo que la gente conoce la tienda, están contentas, repiten, gustan las cosas que traigo… Para mí es el mejor piropo de todos.

Estás muy presente en las redes sociales, ¿cuál es la que más te gusta?
A mí me gusta Instagram, creo que para mi tipo de negocio es con la que más rápido puedes entablar conversación con la gente, más rápido llega… ahora con el tema de los stories  te acerca un poco más a la gente, la gente ve como hablas, como te expresas… es la que más me gusta.

¿Qué tiene que tener una prenda para llevarla o para recomendarla?
Después de tantos años en el comercio, lo que hago es cuando viene la gente, intentar crear como una especie de vínculo y saber que rollo tiene esa persona. Si yo veo que no va con el conjunto de esas persona, porque si tú te pruebas algo que no es de tu estilo se nota que no tiene que ser para ti, lo que yo busco es que tanto la gente que viene a la tienda, tanto yo como, Marta, ponerme algo y ver que soy yo. Poder identificarme con la prenda.



¿Un color? Además del negro, que sé que te gusta.
(Risas) No sé, me gusta el blanco, el turquesa, el rojo… Cada color para según qué cosas, el rojo para el maquillaje, el blanco para la decoración… y para vestir, tengo que reconocer que es el negro.

¿El producto que más orgullosa estés de tener en la tienda?
Obviamente, mis pajaritas.

¡Cuéntanos!
Yo empecé a coser pajaritas porque a mi chico le gustan y como hace un par de años iba a clase de costura, decidí hacérselas yo. Un poco como afición. Cuando abrí la tienda me apetecía tener complementos para chico y dije “qué mejor complemento que se sepa que está hecho por mí y a mano”. Creo que eso está llegando más a la gente.

Y el concepto de tienda ecológico.
Lo que quiero es ofrecer cosas bonitas, en realidad mis prendas no siguen tendencias, quiero prendas exclusivas, que nos se vean en grandes cadenas porque sino vamos a ir todos vestidos iguales. Pretendo dar otra alternativa para vestir. Lo que me gusta es trabajar con gente que veo que pone pasión en su trabajo, que sus diseños son bonitos… Que esté hecho y producido en España, que no haya explotación, que no haya niños que estén sufriendo, ni mujeres… prefiero saber que las prendas que tengo en la tienda han sido hechas por dos o tres mujeres en un taller pequeño.

¿La venta más rara que hayas hecho?
Hay mucha gente que viene buscando regalos y al final se lleva algo para ellas ¡Eso me ha pasado ya con varias clientas! Lo cierto es que no he tenido ninguna cosa así bizarra.

Top Secret
Un libro que te guste… Me gusta mucho cuando leo que me entretenga, hay un par de escritoras que me gustan mucho Elisabet Benavent y Rebeca Rus.
Un disco… El último de Vetusta Morla.
Una zona de Zaragoza que te guste mucho… El centro, callejear por el tubo.
Un viaje que quieras hacer… Volver a París.
Un color imprescindible de pintalabios… El rojo.
Un sueño por conseguir… Por soñar me encantaría en un futuro si todo sigue bien, abrir un Serendipia para chicos. Ese sería un súper sueño.


Nos lo pasamos genial con Marta y volveremos a su tienda.
by Daniel de la Peña



Entrevista a Blanca Portillo by Daniel de la Peña

"Estoy encantada de volver a Zaragoza"


Queremos compartir con vosotros la entrevista que hicimos a la maravillosa Blanca Portillo, cuando estuvo en Zaragoza con la obra "El Cartógrafo" en el teatro principal. Una mujer cercana, cariñosa y una gran profesional. Hablamos con ella sobre su obran, el olvido y mucho más en esta entrevista en exclusiva con la actriz.

Vuelves al Teatro Principal de Zaragoza después de unos años, ¿Qué sientes?
Mucha emoción, porque ya decía que Zaragoza es como plaza obligada, era un lugar importantísimo de referencia. Si no pasabas por el Principal de Zaragoza goza era como “¿Perdona?” (Risas). Entonces, me hace mucha ilusión volver y me encanta pensar que el teatro vuelve a estar aquí bien, sano, lozano, fuerte y robusto. Así que estoy encantada de volver.

Una obra donde tú encarnas a tres personajes, ¿Es más divertido o tienes más responsabilidad?
Las dos cosas en la misma proporción. Es muy divertido porque te permite juegos maravillosos en el escenario, pero evidentemente, si es ya difícil hacer uno bien, imagínate tener que hacer tres… O imagínate mi compañero José Luis García Pérez, que son nueve los que tiene que hacer. Es una responsabilidad mayor pero también es un disfrute muy grande. De todas formas yo creo que no nos planteamos el trabajo así, porque sino no saldríamos al escenario. Hay que tener en cuenta, además, que has hecho mucho trabajo, mucho estudio, mucha preparación y confiar. Y sobre todo confiar en que el espectador sabe que tú no eres todas esas gentes y que lo que nos falte lo ponen ellos de alguna manera.



¿Qué es lo más bonito que te ha pasado encima de un escenario?
Me han pasado cosas maravillosas. Para mí subirme al escenario siempre es… primero, no sé lo que va a pasar por mucho que yo sepa qué es lo que tengo que decir o qué es lo que va a decir mi compañero, ¿no? Hay un factor sorpresa que siempre es tremendamente emocionante. Con respecto al público, lo que yo he recibido del púbico… son cosas que yo no puedo olvidarme. No me han pasado grandes anécdotas, pero sí me ha ocurrido tener el privilegio de sentir que la gente estaba ahí contigo y que cuando salen te dicen lo que les ha pasado, ves a la gente absolutamente conmovida, absolutamente emocionada… gente que te dice que te vio por primera vez hace mucho tiempo y que te sigue porque confía que cuando va a verte va a ver algo que le interese. Esa especie de extraña fidelidad es una generosidad enorme porque no saben quién eres, solamente han visto tu trabajo… me siento enormemente feliz y privilegiada con eso. Por eso no puedo dejar de hacer esto, ni quiero dejar de hacerlo.

En esta obra habláis del olvido, ¿Por qué crees que a veces nos resulta tan fácil olvidarnos de algunas cosas?
Yo creo que encarar el dolor y los errores no es fácil. Vivimos tiempos de mucha velocidad, donde hay poco tiempo para la reflexión, creemos que a veces lo que hacemos no deja secuelas. Y socialmente igual, creemos que porque haya habido una segunda Guerra Mundial ya se terminó y nunca más. Tenemos una capacidad para no darnos cuenta del eco de nuestros actos, pero que eso dejan las secuelas que da miedo, además, y prefieres mirar hacia otro sitio y pensar que aquello que pasó no va a volver a pasar. Que aquello no afectó a nadie más que a los que lo vivieron de cerca, no me toca, no me importa… el huir… el ser humano es bastante negador de cosas… nos da miedo. Yo creo que tiene que ver con el miedo y con especie de extraña vanidad que tenemos. Ese es el gran problema, cuando crees que lo que ha sucedido ya no está, te estás equivocando de medio a medio, el pasado está en el absoluto presente, está aquí, no lo puedes tapar por mucho que quieras. Como decía José Luis en la rueda de prensa, “Debajo de las acedas, en las losas de cada ciudad hay muertos, hay vivos, hay llantos, hay recuerdos, hay ancianos, hay niños, hay guerras…” No puedes hacer como que no está. Y en tu vida es exactamente igual, aquello que hiciste y que te pasó no se va a borrar, está ahí.

¿Qué tiene que tener un buen proyecto para que digas “me voy ahí”?
Este es un buen ejemplo, siempre busco un texto que a mí me conmueva y me importe. Y que sienta que estoy obligada a comunicarlo, a traspasarlo al espectador. Un buen autor como lo es Juan Mayorga, un buen director, alguien que sea capaz de leer teatro y traducirlo a emociones encima del escenario con inteligencia es Juan Mallorga y los compañeros. En este caso tengo un compañero que vale por nueve personajes, al que adoro, al que respeto y al que admiro. Este proyecto tiene las condiciones que pido al puchero de mis gustos cuando yo decido llevar adelante un proyecto, tiene que tener estos ingredientes.

sábado, 18 de febrero de 2017

Entrevista en Exclusiva a Sheila Herrero

¡Buenas! Estamos emocionados porque comenzamos con la primera de las entrevistas con fotos en exclusiva a artistas aragoneses.

Entrevistamos a nuestra amiga, la gran patinadora Sheila Herrero, con fotos de Javier Castañer, tienda y vestuario de Serendipia (C/ Bernardo Fita 23) y peluquería de Making of Beauty ( Calle Poeta Marco Marcial) entrevista por Daniel de la Peña.

¿Qué significa Zaragoza para ti?
Para mi Zaragoza es mi vida. Afortunadamente he tenido la suerte de viajar por todo el mundo y conocer todo tipo de países y continentes… pero siempre vuelves a tu casa que es Zaragoza. Me siento muy maña, te tira tu familia y amigos, pero sobre todo tu ciudad.

Has dicho que has viajado mucho, ¿Algún viaje que recuerdes?

He viajado por todo el mundo y tengo muchos recuerdos… Sobre todo en Latinoamérica que me idolatran mucho y fue llegar a Colombia y tenía mucha gente esperándome en el hotel, en el aeropuerto. Era un ídolo y eso ni siquiera lo he tenido en mi país, fue llegar y en el hotel mucha gente me hacía regalos, bombones, mogollón de peluches…


¿Cuál es el piropo más salvaje que te han dicho?
¡Tengo unos cuantos! (Risas)
Uno que se pueda confesar
La mayoría de los hombres siempre me dicen con el tema de las piernas, al ser deportista les gustan las piernas y el culete, que los deportistas lo tenemos muy duro y siempre tiran por ahí.


¿Una prenda imprescindible de ropa?
¡Unos buenos tacones! ¡Toda mi vida encima de unos buenos tacones! Si tengo que ir cómoda me pongo unas zapatillas, pero que tengan incorporado tacón y si no, me pongo unas plantillas para que suban. Tengo costumbre de llevar las piernas en alto y es la comodidad como si llevara patines.